No me extraña la lloraera del portugués en la gala, el hombre veía imposible volver a conseguir el trofeo con Messi en el campo. Se tuvo que dar dos circunstancias anómalas para poderlo ganar:
1- Que Messi se tirara medio año lesionado
2- Que hubiera un pucherazo de la FIFA
Las dos circunstancias se dieron, y nunca una cacicada a quedado tan rápidamente retratada en un campo de fútbol por el verdadero Rey de este deporte.
Se puede entrenar el físico, se puede entrenar el disparo, pero lo que no se puede entrenar es el talento. Y de eso Messi le da mil vueltas a Cristiano.
Así que ahora mequetrefes de la desinformación, terroristas de lo absurdo, intoxicadores de la palabra, haber que os inventáis para volver a intentar desprestigiar al Dios del fútbol.
Y lo dicho, no hay nadie más tonto que el que se cree sus propias mentiras.
17-1-2014 Raúl
